Posts tagged ‘Swing’

STRAPHANGIN’ – The Brecker Brothers


Del álbum Straphangin’ (Arista, 1981)

Los hermanos Michael y Randy habían pasado ya, como músicos de sesión, por discos como el «Berlín» de Lou Reed, el «Mothership connection» de Parliament o el «Get your wings» de Aerosmith y grabado casi media docena de discos como grupo cuando se pusieron al lío con «Straphangin'». Buen bagaje musical. Así que, aunque no fueron pioneros, ni los mejores músicos ni los más creativos de la década ni mucho menos los de mayor éxito, sí lograron configurar un conjunto de piezas notables. Y esta en concreto tiene un groove que me encanta.

Sí, el comienzo es obviable. Se ve que su deseo de fusión les llevó a terrenos pantanosos, o que les pareció interesante-simpático-moderno realizar una especie de preludio barroco que también serviría de circular conclusión con aditamentos que recuerdan a la psicodelia de The Beatles. Sin ir más lejos, la batería y el bajo no parecen saber dónde meterse, avergonzados del papelón que les toca. Un fiasco.

El calderón sobre la dominante nos lleva a aguas más claras y a la verdadera esencia del tema. Sobre una batería que mantiene un swing perfectamente fusionado con los tiempos más marcados del rock vuela un huidizo bajo funk y un sinte que aporta un toque más futurista a determinadas partes, a la manera de Hancock. Por encima, la melodía principal interpretada a unísono por los hermanos Brecker al saxo y la trompeta, que tan sólo se separan para aportar un par de voces muy interesantes sobre notas extrañas a la armonía.

Como ya he dicho, el deseo de innovar no debía estar en el primer puesto de prioridades del grupo. Aquí se mantienen los estándares del jazz prácticamente desde que es jazz: una melodía principal que sonará un par de veces al principio interpretada por los instrumentos solistas en conjunto, una rueda de improvisaciones sobre la armonía del tema y vuelta a la melodía principal para concluir. A esto le añadimos un pequeño corte-estribillo instrumental, que permite dividir las secciones y nos sitúa formalmente, además del ya nombrado preludio-coda. Lo que venía haciéndose y seguiría llenando pistas y pistas de vinilos y cds.

Descubrí este tema hace unos meses, cuando me animé a tocar la batería y a profundizar con ella un poco más en este estilo (gracias a Guille y a Johnny por los ensayos y sus amplios conocimientos jazzísticos). Y este fue el primero que me propusieron tocar. Lo escuché detenidamente. A simple vista (u oído) esa batería jazz-rock-funk no parecía muy compleja. Pero cuando me senté al instrumento descubrí la grandeza del ritmo al que me sometía, ese groove quebradizo que implica un dominio del tiempo y sus entresijos. Muchos puristas del jazz han denostado estas fusiones por considerar que se apartan del shuffle propio del swing. Ahora puedo hablar con conocimiento de causa: nada más lejos de la realidad.

Versión de estudio:
[Youtube = http://www.youtube.com/watch?v=pq3MPs3W_S8%5D

Versión en directo, con un solo bastante visceral de Michael:
[Youtube = http://www.youtube.com/watch?v=7Tvso1FcH0s%5D

21 marzo 2010 at 9:08 am 1 comentario

1234 – Feist


Del álbum The reminder (Cherrytree Records, 2007)

Yo quiero hacer canciones como las que hace Feist. De sonido fresco, amables, de las que te hacen que el día parezca mejor. Accesibles a todos, pero con personalidad. Pop con mayúsculas.

La que os traigo aquí supuso un lanzamiento brutal para la cantautora, al salir en un anuncio de una importante marca de mp3, llegando a ser nominada para Grammy. Esto no la hace mejor canción que muchas otras, y de hecho el «Let it die» es fabuloso de cabo a rabo. Pero la alegría que desprende esta canción (¡¡no dejéis de ver la versión de Barrio Sésamo!!) me apetecía hoy, mira tú.

Eso sí, en cuanto empiezo a informarme de lo que se dice de ella, de su música y de su canción, empieza el mosqueo :/ Como siempre, me traen de cabeza los géneros a los que se adjunta. En concreto, me mosquea el «pop barroco«, término que hace referencia al uso de instrumentos clásicos, especialmente los de cuerda. Bien es cierto que en la segunda mitad de los 60 se pusieron de moda recursos que recordaban al barroco, sobre todo determinadas progresiones «alla Vivaldi». Pero aquí se prescinde por completo de cualquier sonido barroco, término que más bien se asocia con lo recargado y escesivamente adornado. El que inventa géneros ese día estaba poco inspirado :d

El resto de adjetivos se encuentran en ese terreno de «no me mojo del todo». El «indie», por ejemplo. Y el «anti-folk«, que me parece muy bonito pero dice más bien poco. Sólo tenéis que echar un vistazo a la wikipedia y veréis que la discusión es muchísimo mayor que el propio artículo. En fin, ya se verá en qué queda todo esto. Yo de momento veo rasgos de pop y rock sin complejos para utilizar una instrumentación original, a veces cercana al folk americano (como en este caso) y sobre todo instrumentos acústicos (como el piano… de verdad, con sus martillos y todo) y que en general tiene un aire vintage. El hecho de que sea cantautora tiene que ver en su sonido, claro.

Uno de los grandes aciertos de esta canción, a mi juicio, es el uso del banjo, instrumento que ha ido cobrando protagonismo en la música actual, desde el jazz hasta el rock. Su delgado sonido nos aproxima a la música country, género con el que siempre coquetea la canadiense, sin dejarse llevar por el estilo. Con el resto de instrumentos apreciamos el gusto de las producciones de Feist -y que es muy frecuente en la actualidad- por utilizar instrumentos que se apartan del sonido pop-rock. Aquí tenemos un piano que suena un poco añejo, metales, cuerdas y, como no, la guitarra, el bajo y la batería, para no pasarnos de rosca.

El sonido acústico se refuerza con los abundantes coros y con palmadas en el último estribillo, que nos mete en la canción como si fuera de directo. Por lo demás, la sugerente voz de Feist es plato fuerte, con un timbre que parece ser que se ve influenciado por la presencia de nódulos que le da un sonido mate con algunos armónicos agudos. A mi, desde luego, me encanta.

Aquí tenéis el vídeo oficial, perjudicado por Youtube. De hecho, os recomiendo escuchar el disco por la reverberación que le han dado al vídeo (¿porqué?). Eso sí, ojo a la coreografía (abundante en bailarines) y a los bailes que se marca Leslie Feist con un traje brillante en contraste con su forma de moverse y la propia canción.

[Youtube = http://www.youtube.com/watch?v=q2kvc74OWdQ%5D

Versión de «Sesame Street», con una letra que nos enseña de forma magistral cómo se cuenta hasta cuatro y lo divertido que es : D

[Youtube = http://www.youtube.com/watch?v=fZ9WiuJPnNA%5D

28 julio 2009 at 5:21 pm 2 comentarios


AUDICIONES


Creative Commons License
Todos los post de este blog se encuentran bajo licencia de Creative Commons.

Diseño: Marcos Padilla

Escribe tu dirección de correo electrónico para suscribirte a este blog y recibir notificaciones de nuevos mensajes por correo.

Únete a otros 73 suscriptores

Feeds

Categorías

La Catedral Sumergida

Ofertas CO2 neutral

Recomendaciones

De Madonna al canto gregoriano
De Madonna al canto gregoriano: una muy breve introducción a la música
Nicholas Cook

Quizás el subtítulo es lo que más pudiera despistar de este fantástico alegato contra la tradicional concepción "elevada" del arte musical con mayúsculas. Especialmente recomendado para quienes, como yo, procedemos de conservatorios y se nos ha insistido en la predominancia de Beethoven o Brahms sobre las músicas "menores".

Más clics

  • Ninguno